lunes, 12 de julio de 2010

Sin embargo, dos puntos

Sin embargo:

vi uno, bailando en un concierto de rock, en unas fiestas de barrio, barrio pequeño y con garra, como él: un chaval llamativamente espontáneo, que agitaba los brazos, se retorcía, disfrutaba bailando. Daba gusto verle. Sin embargo:

otros niños lo señalaban, se reían, le imitaban, y, una y otra vez, se le acercaban, le acosaban. Gritó: ¡dejadme en paz! Y siguió bailando, solo.

Sin embargo:

hay un final feliz, si quieres quedarte con esto:

una niña pequeñita, de dos años más o menos, empezó a imitarle, se puso a bailar, espontánea, feliz.

O si quieres quedarte con él.

6 comentarios:

  1. Askotan, gauzarik xume eta txikienak izaten dira gure izaera markatzen dutenak.
    Akaso, bi urterekin dantzan hasi zelako egingo du dantza neskatila nerabeak, besoak zabalik, airean.

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  2. Si es que los niños son los que más saben...
    Sin embargo... todos bailamos a un son que es difícil de seguir, y de imitar, pero cuando pillas un paso y te lanzas al vacío... puedes convertirte en la persona más feliz del mundo

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  3. Me gusta el ritmo de tu escritura, cómo suena leído, cómo suena escrito.

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  4. Me quedo con los dos. Fue un gusto contemplarles. Y esa sensación que me recorrió de ... ¡quién pudiera!.

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  5. Es como cuando alguien dice "cosa de niños"... como si eso no fuera bastante cosa.
    Pues a mí me encantan las cosas de los niños, y los niños que tenemos en nosotros mismos, y ahora... es que estoy ahí, y que me dure.
    Va por vosotros el siguiente post.

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